El voto del senador Miguel Ángel Yunes Márquez (PAN) será definitivo para aprobar el martes por el pleno de la Cámara de Senadores la enmienda constitucional en materia de reforma del Poder Judicial que establece la elección por voto directo de los ciudadanos, de ministros, jueces y magistrados.
La noche del lunes circuló la versión que el veracruzano renunciará a su militancia panista para sumarse a los partidos Movimiento Regeneración Nacional (Morena) o Verde Ecologista de México (PVEM), lo que garantizará la aprobación de la reforma judicial en ciernes, que requiere de mayoría calificada equivalente a dos tercios de los senadores presentes al momento de la votación.
Los 21 senadores que quedan en el grupo parlamentario de Acción Nacional en el Senado y sus respectivos suplentes, acuartelados desde la tarde del lunes por la dirigencia nacional del partido como medida de seguridad para evitar lo que hizo Yunes Márquez de faltar a su palabra de votar en contra de la reforma judicial, lo estuvieron esperando pero nunca llegó.
«Como fue del conocimiento de todos ustedes, la semana pasada todas y todos los senadores de Acción Nacional, uno a uno de viva voz, ante los medios de comunicación, manifestamos nuestro compromiso de asistir a la sesión y votar en contra de la reforma al Poder Judicial, entre ellos el senador Miguel Ángel Yunes, quien hasta este momento no ha expresado una postura diferente. Como coordinadora del grupo parlamentario de Acción Nacional hago un respetuoso y firme llamado, a que confirme su postura en torno a la reforma del Poder Judicial», declaró a la prensa Guadalupe Murguía al filo de las ocho y media de la noche en la Torre Azul de Paseo de la Reforma, frente a la sede senatorial, acompañada del resto de senadores panistas, entre ellos Marko Cortés, presidente nacional del PAN.
La queretana exigió «al gobierno federal que deje de presionar a las senadoras y los senadores de oposición con ofertas corruptoras y actuaciones intimidatorias de las fiscalías. La subsistencia de la República depende de la integridad, el honor y el patriotismo de las senadoras y los senadores de oposición».
Polémica
En la Cámara Alta está todo dispuesto para que el pleno cameral discuta y vote este martes 10 de septiembre el decreto por el que se modifica la Constitución en materia de reforma del Poder Judicial.
Existe polémica sobre si las dos terceras partes de los 128 legisladores que conforman el Senado son 85, justo los senadores que suman los grupos parlamentarios de Morena, PT y PVEM, u 86 como arguye la oposición del PAN, PRI y MC, integrada por 43.
«Al día de hoy tenemos 86 (senadores). Pero sigo insistiendo que con 85 tenemos la mayoría calificada… . Lo he dicho desde la semana pasada, pero no me quieren creer», declaró al mediodía a la prensa Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado.
—Oiga, senador. ¿El voto 86 qué color es?, fue la pregunta.
—»Pues color Morena. ¿Qué color va a ser?» -respondió.
—¿Y quién es el voto 86?
—»Lo verán sus ojos. Lo verán sus ojos. Lo verán sus ojos».
Los 15 senadores del PRI, aseguró Manuel Añorve, coordinador de la bancada tricolor, están también acuartelados junto con sus respectivos suplentes y preparados para rechazar la enmienda constitucional propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador en el momento que la mayoría de Morena decida someter el decreto a votación.
“Nosotros estamos listos para votar en contra’’.
E insistió en demandar de Fernández Noroña y Adán Augusto López Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y coordinador de la bancada senatorial de Morena, una respuesta jurídica por escrito sobre “el estado que guardan los cuatro amparos, las suspensiones definitivas’’ otorgadas por el Poder Judicial para detener el proceso legislativo de la reforma judicial porque “lo que no queremos nosotros es caer en desacato’’.
Secretario general de CEM
Iglesia católica critica cambios
Monseñor Ramón Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) aseguró que la iniciativa de reforma judicial, que está por discutirse en el Senado, no responde a las necesidades de una revisión integral del sistema de justicia en México ni garantiza una impartición de justicia más cualificada y justa.
El también obispo de Cuernavaca criticó la propuesta de reforma al señalar que la reforma “afecta la autonomía del Poder Judicial y pone en entredicho la división de poderes que establece nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”.
“Pedimos que se escuche el punto de vista de los integrantes del Poder Judicial de la Federación, a los jueces, magistrados, ministros y ministras, y alentamos a continuar las reflexiones de colegios de abogados, estudiantes y profesionistas, en las que coinciden con distintos organismos internacionales que manifiestan que la elección para el cargo de jueces y magistrados, además de politizar y debilitar la impartición de justicia en México, no ofrece ninguna garantía para superar la corrupción y la impunidad que requiere urgentemente la ciudadanía”, dijo el miembro del CEM.
Ramón Castro llamó a los senadores a que, tomando en cuenta su responsabilidad y la trascendencia del tema, se tomen el tiempo suficiente “para reflexionar con profundidad”. (Arturo Rojas)